En Noviembre de 2006 el anterior consistorio de Lliçà d’Amunt decidió que lo que necesitaba la población era una iluminación homogénea y amarilla por la noches ( http://garum.blogspot.com/2006/11/amarillo.html ). Desde entonces hemos podido “disfrutar” de una única gama de colores amarillos extraordinaria, deseando cada noche que llegara el sol para poner las cosas en su lugar.
Durante la pasada Festa Major de Lliçà, el nuevo consistorio decidió decorar la Plaça de Catalunya, centro neurálgico de los actos, con una decoración festiva similar a la que se había hecho otros años, pero ¡sorpresa! no se les ocurre otra cosa que escoger el color ¡!!beig¡¡¡ Pantone 7501+-.
Creo que hemos batido un record mundial, pienso que poca gente occidental relaciona ese color con fiesta, baile, música, juerga, diversión, etc…, es un color para un Volvo, una faja o una tirita, pero nunca para la fiesta más importante del año.
Todos nuestros gobernantes seguro que han tenido y tienen cosas buenas, pero la sensibilidad por la estética, la armonía y por un pueblo visualmente atractivo, hace años que brilla por su ausencia.
También hay que decir que los vestidos de les Gitanes y els Gegants lucieron como nunca bajo el color BEIG. Algo es algo.